Oposiciones Abiertas.

De sobra es conocido que recibo todo tipo de mensajes en cualquier red social.

Ya hemos hablado de los menos agradables, los más soeces y hoy toca hacerlo de esos que vienen “con disfraz”.

No voy a negar que no todo son malas formas cuando alguien contacta a  través de algún medio. Por suerte hay quienes se molestan mínimamente y conservan la educación.

Lamentablemente siempre hay algún pero.

Como siempre recuerdo, en todas las redes en las que participo dejo bastante claro que no hay ninguna intención por mi parte de tener más relaciones de las que ya tengo.

Con esta información por delante, el hecho de que alguien se ofrezca sin más ya me resulta un patinazo desagradable, y si además lo hace después de haber intercambiado alguna conversación y dejado claro mi panorama, una falta de respeto.

Pero hay otro tipo de “aspirante”. Ese que te pide que “una oportunidad” ese que “quiere probar si es digno de ti”.

Sí, todo son buenas palabras, maneras de lo más educado posible, pero el mensaje es el mismo. Realmente eres lo que menos  importas.

¿Por qué iba a querer probar a alguien que no me produce ningún sentimiento?

¿Por qué tendría que hacerlo cuando realmente ya dejo claro lo que tengo?

Quizás alguien vea un halago en una proposición así, bueno, quizás no.  Es una realidad que algunos no dejan de reseñar, pero realmente lo que hay detrás es muy poco diferente a ese que se ofrece a servirte o que quiere estar a tus pies en el segundo mensaje que te envía y que a poco que le rechaces termina regalándote una lista de insultos.

No entiendo a las personas que ven esto como una especie de “oposición”, a la que te presentas a un examen y si apruebas puede que te lleves algo y si no, pues lo dejas para “la siguiente”.

¿Tan poco se valoran a sí mismos?

Ojalá pudiera pensar que realmente es esto lo que hay detrás, pero de nuevo creo que el mensaje es el que es:

No quieren servirte a ti, quieren que tú les sirvas a ellos.

El cómo, el cuanto y el por qué, es lo que menos les interesa.

Y de nuevo, me gustaría estar equivocada y pensar que no todo es así, pero solo me hace falta echar un vistazo a mi bandeja de entrada de instagram y ver, como uno de esos perfiles que me pedían una prueba hace 7 días, hoy en su perfil ponen que son sumisos de otra persona.

Siento lastima, algo que llega a ser muy bonito, personal e importante pasa a ser algo que roza lo despreciable y que acarrea muy mala fama para quienes sí que lo viven de verdad.

 

 

Otro punto que me parece muy gracioso de estas personas que disparan a diestro y siniestro pidiendo oportunidades y pruebas, es que no deben pararse a pensar que muchas veces hablamos entre nosotras.

Yo misma estoy en un grupo con mas Dominas donde el intercambio de información es bastante habitual, y comentamos de estas lindezas y otras. Podría decirse que tenemos una buena “base de datos” de especímenes que intentan colárnosla a todas para conseguir un ratito de… “sumisión real y única”

Pobrecitos, al final ni con oposiciones consiguen su “plaza”.