Mar De Fondo.

Iba en busca del mar.

O más bien, tratando de reencontrarte después de unas horas de esa extraña distancia que a veces se impone entre nosotros

Tenía claro el camino que debía seguir, ya lo había recorrido otras veces y sabía cuál sería mi destino.

Ese, que en algún momento compartiríamos.

Sin embargo, me topé con un cruce. Uno por el que había pasado otras veces, aunque que no me había atrevido a seguir.

Hoy fue diferente.

No sé por qué decidí variar mi rumbo, pero mis pasos se dirigieron por un nuevo sendero sin saber muy bien que me iba a encontrar y a qué destino llegaría.

Tomando las precauciones necesarias, iba disfrutando según me adentraba entre los árboles.

Esa sensación de novedad me hacía mirarlo como se miran las cosas por primera vez.

Sin prejuicios y simplemente valorando lo que se me ofrecía.

Warcry sonando en mis auriculares, detenido momentáneamente por un mensaje.

Un mensaje tuyo. Curiosamente, con todas las horas que hay en el día, elegías esa para escribirme.

A veces las casualidades tienen mucho de causalidad.

Y sonreí. Perdida en aquel sendero, caminaba sonriendo a la nada.

Entendiendo que, a veces, las metas no son lo realmente importante y que a veces hay que salirse de lo que creemos conocido para encontrarnos con lo que realmente queremos.

Da igual por donde camine, al final el destino estará donde yo quiera que esté.

Donde queramos que esté.

Con mar, o sin él.