19 feb 2020

Acertado hasta en el nick.


Para los que vengáis buscando un “relato”, siento la decepción pero hoy no toca. Como siempre digo, mi blog en una gran parte es un reflejo de lo que siento y aunque para hoy había programada otro tipo de entrada, he querido modificarla casi sobre la marcha.

El lunes fue un día horrible. Uno de esos en los que la noche anterior has tenido una de esas charlas menos placenteras de lo habitual y te ha dejado un tanto desconcertada. 

Quien convive conmigo lo tuvo claro desde primera hora del día sólo con ver mi cara y a estas alturas ya sabe como “esconderse”. 

Fue un día largo en el que cualquiera que estuviera a mi alcance era una posible “victima” del cabreo que acumulaba. Alguno de hecho, se llevó un bufido que quizás no se mereciera del todo.

Aun así, siendo consciente de que debía reprimirme más de uno se llevo una respuesta que no habría sido esa en cualquier otra circunstancia.

A última hora de la tarde suena el teléfono. Es Toofast, mi ex sumiso. Mi primera reacción fue la de no responder la llamada (¿Confesión innecesaria?...). Pero hacía unos días que no hablábamos y no me pareció justo no hacerlo.

Respiro, descuelgo…  

“¡¡Muy buenas!!”

Y su respuesta… 

“¿Qué te pasa?”

Desconcierto inicial por mi parte, si no he dicho nada extraño… no me lee en otros sitios donde he reflejado el cabreo que llevo dentro… ¿Cómo leches va a saber nada?

Disimulo como puedo. 

“Nada… Todo bien, ¿y tú?”

Parece que cuela. 

Hablamos de lo humano más que de lo divino. De esas cosas del día a día menos entretenidas que los “vicios” que nos mantienen unidos a pesar del tiempo y de la distancia.

“Joder niña… (donde hay confianza.. ) No sabes que puesta de sol más bonita hay hoy”

Me da envidia, le cuento que donde vivo es raro verlas, y que hay un sitio en Asturias donde los que hay son espectaculares y lo bien que me vendría estar ahí viéndolo. 

De repente se queda más callado de lo habitual y cuando pregunto, me dice que hay tráfico y que necesita ir un poco atento… 

Pero no… 

“Mira lo que te acabo de enviar”



Y si, probablemente no refleja lo que él veía, una foto tomada en las circunstancias menos apropiadas pero que significaba mucho más que un simple anochecer.

Le digo cuanto le odio y me meto con el por lo tierno que se pone a veces, aun sin obligaciones de hacerlo… y…

“Lo que tú quieras, pero… ¿me vas a contar ya que te pasa?”

Y si, termine “confesando”. El escuchándome y entendiéndome. Reconfortándome y dejando que vomitara parte de ese cabreo y decepción que acumulaba.

Consiguiendo que incluso pudiera reír y aliviara ese malestar que llevaba dentro.

No llevo la cuenta de los años que llevamos separados, sin una relación D/s entre nosotros. Pero al final, lo mejor que se puede crear en este tipo de relaciones sigue muy presente, confianza, complicidad y conocimiento.

El sabe lo orgullosa que siempre he estado de lo que compartimos, y el sitio que siempre ocupará. Quizás no sepa lo afortunada que me siento de seguir teniéndole ahí cuando de alguna manera intuye que me hace falta. 

O quizás… viendo que es algo brujo, sí que lo sepa. Sea como sea, cuando lea esto le quedará más claro aun y yo tendré que aguantar los cachondeos de haberme puesto tan “ñoña”.




4 comentarios:

Qarpatian dijo...

En ocasiones, nos empeñamos en ver todo cuanto hay de negativo en determinadas cosas y no nos percatamos de lo afortunados que somos en muchos otros aspectos. ¿No te parece?

Un saludo y... ¡¡ARRIBA ESE ÁNIMO!!

AMA ISTHAR dijo...

Qarpatian:

Aunque quizás pueda no parecerlo, soy consciente de la suerte que tengo... Y que he tenido.

Simplemente hay momentos en los que la tormenta es necesaria para que vuelva a salir el sol. (Aunque sea con ayuda casi mágica).

En mi blog siempre trato de ser realista, y no solo dar la visión más romántica y perfeccionista de este mundo, porque realmente también tiene una parte en la que no se disfruta tanto.

Aun así, creo que de todo se puede aprender, y una vez hecho incluso hay una parte positiva, que es ampliar el conocimiento y fortalecer la relación.

Gracias por pasarte por aquí ¡!

Toofastedi dijo...

Buenas,

Como la mayoría de las veces, con retraso, quería dar mi punto de vista y agradecerte tan preciosa explicación de lo compartido.

Sabes que, por desgracia (al menos para mí), no hemos podido compartir tanto tiempo en contacto físico como el que me hubiera gustado, pero escrito (al final un poco menos, siempre ando demasiado limitado de tiempo) y sobre todo hablado (ahí sí... me encanta que me acompañes en los viajes en coche, lástima no poder cerrar los ojos un momento mientras me hablas y conduzco, sería lo que me faltaría para poder sentirte totalmente a mi lado…), eso es otra cosa.

Para mí, escucharte es sentirte, y leerte es como oírte (sobre todo los relatos, que envidia del que pueda ser el protagonista) … Me encanta, además sé que en muchos casos no me quieres contar cosas para no preocuparme, pero sabes que no cuela, y sabes que, aunque sólo pueda ser de esa forma, por teléfono, me tienes para lo que necesites, porque si, porque yo quiero, porque me gusta que sea así, y creo que, en el fondo, a ti también…

Como crítica constructiva, no reconozcas en público lo poco protocolario y respetuoso que llego a ser, ni que te pones noña conmigo (acabo de ensanchar, ya no quepo en el despacho…), que luego pierdes la “fama bien ganada” de Ama y Dueña salvaje, cruel y temible que tienes… Que los dos sabemos que eso siempre te ha preocupado mucho y no quiero ser yo quien la fastidie… 😉

Espero no perder el conocimiento que sobre ti tengo nunca y poder apoyarte siempre, Señora (no me atrevo a poner el Mí, hace tiempo ya que no me lo puedo ganar).

Besos donde tengas a bien recibirlos y donde desees que se apoyen mis labios.

AMA ISTHAR dijo...

A ti no te respondo mas que lo necesario...

Hay cosas que se acaban porque las circunstancias obligan, pero ese no fue nuestro caso.

Siempre tendrás tu sitio.

Y además de todo eso, tengo la gran suerte de que sigas a mi lado en muchos otros aspectos.

Un besazo.

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