Hace media hora que le doy vueltas a que escribir en este
post.
Tenía varias ideas en
mente pero ninguna toma la forma que quiero y tampoco me apetece estar dándole más
vueltas de las necesarias.
Y mientras tengo el editor de texto abierto, ojeo páginas y
foros de BDSM buscando una inspiración que no llega.
También tengo abierto mi gmail. Ese donde recibo mensajes del formulario del
blog. Avisos de mensajes que me envían por otros sitio, algún correo con
ofrecimientos habituales y…
Su último correo.
Ha llegado hace un rato. Y no he podido evitar devorarlo en
cuanto he visto el aviso. Y un día un tanto gris ha empezado a tener una luz
especial.
En cuanto me he sentado con el ordenador, he vuelto a
releerlo, y aunque nunca me pierdo un detalle la sensación ha sido la misma.
Y si, mi cabeza está muy lejos… Deseando y pensando en un
momento muy especial.
Estoy feliz, me siento plena y muy afortunada y me apetece
gritarlo… Pero tengo esa necesidad de guardarme este momento para mí, para
nosotros.
Cuando menos te lo esperas algo cambia, o más que cambiar se
confirma y es que a veces lo que parece imposible solo se retrasa porque no era
su momento.
Cambia tanto, que te pasas minutos mirando la firma de un
correo. Sorprendiéndote de que un símbolo al que nunca le habías dado especial
importancia te pueda llegar a hacer tanta ilusión. Y más que por lo que te hace
sentir a ti, es por lo que sabes que siente quien lo ha escrito.
Probablemente muchos de los que me leéis no entendáis ni la cuarta
parte de este post. Es más, creo que podría hasta tener claro el número de
personas que si lo entenderán y yo estaría incluida en ese número.
Pero es lo que hay.
Como he escrito muchas veces, este blog es un gran reflejo
de mi misma y es así como estoy. Contenta, pero sin terminar de creérmelo.
Disfrutando pero tomándome el tiempo necesario para construir. Tiempo para
asimilar un gran momento.
Y para ser una de las últimas entradas de este ciclo (se
acercan vacaciones), me fastidia un poco que su contenido sea tan raro… Pero
todo tiene su momento y a mí lo que me apetece es disfrutar y no pasar minutos
en búsqueda de inspiración.
1 comentarios:
En la vida hay diversos momentos,
épocas, sombras y resplandores,
sensaciones,lugares,personas...
Más no hay que desperdiciar nada,
ninguno de los instantes que nos da
y nos brinda el regalo de la vida,
de las personas que en ella habitan.
Ese instante de brillo y luminosidad,
indescriptible y real.
¡Fogonazo de luz!, que nos hace sentir que estamos vivos,
y nos permite disfrutar de esa vida
que vive en nosotros y en los otros.
!Cada momento e instante que llega!
como el fruto de un árbol muy hermoso,
que pende sobre nosotros, cercano.
Alargar la mano es fácil.Mas el fruto,
puede ser venenoso o el más dulce,
manjar que llegó a nuestra boca.
La decisión es siempre nuestra...
!Y la vida ....son momentos,nada más...
Bueno, creo que este poema resume tu post a mi manera, o sea, en plan artístico que es lo mio (no lo escribí yo pero bueno, cuando alguien crea algo y lo comparte.... se queda en el aire para uso y disfrute de los demás). Me alegro por ti y por esa alegria que casi siempre suele llegar de manera inesperada. Un momento es cero y el siguiente es uno. Blanco y negro, ying y yang. Contrastes que van dando forma a nuestra vida. Disfruta de ello a tope. Como dijo William James, el padre de la psicología: "el pájaro no canta porque es feliz. Es feliz porque canta". Bonito y profundo. Asi que canta tu canción a los cuatro vientos, aunue nadie te entienda. Esa fue siempre mi filosofía y lo seguirá siendo. A disfrutar...
F
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