Esta semana tengo una tarea que llevo retrasando mucho tiempo.
Abrir mi maleta de juguetes, con intención de revisarlos y hacerles una limpieza, que se han pasado meses ahí dentro.
Hasta ahora no me he puesto, primero porque no había necesidad de usarlos y segundo, temía el momento de encontrar ciertas cosas.
Los collares.
Puede que sea de esas que peca de sensible, y siempre ha habido objetos que he guardado por el recuerdo que suponían. Seguían teniendo su propio espacio.
Hasta ahora verlos no me provocaba nada que no fuese positivo. Pero ¿Cuándo la cosa cambia?
Es cierto que nunca fui de esas que les otorga un misticismo especial (aunque eso quizás haya evolucionado). Es un símbolo bonito y que recuerda momentos intensos. Como cuando eliges la placa, la mandas grabar y cada vez que la colocas en el cuello de la persona con la que compartes algo que os une.
Hace meses que me devolvieron uno de ellos. Lo dejé en la misma bolsa y no he querido volver a mirarlo. Y con los de la maleta, algo similar. Sé que están ahí, pero mejor no verlos.
Al menos hasta ahora.
Llega el momento de seguir caminando y hay que dejar cosas atrás. Y aunque lo sepas, no quiere decir que duela menos.
¿Y qué se hace con ellos?
Tirarlos a la basura me parece como si despreciase lo que han significado, pero guardarlos, carece de sentido.
¿Hay algún ritual de destrucción que dignifique un poco el hecho?.
Creo que no hay una respuesta adecuada. Imagino que al final los trasladaré de sitio hasta que llegue el momento de deshacerme de ellos.
Si escribo este post, es porque normalmente (O al menos así lo he visto yo), siempre es la parte sumisa la que refleja ese momento. Poco he leído a Dominantes, (Diría que no recuerdo ningún texto sobre esto) expresar lo que hacen con un objeto que tanta carga tiene.
Sea como sea, ha llegado el momento de dar el paso y aunque sé que no va a
ser sencillo, también estoy segura de que la próxima vez que realice ese gesto
de poner un collar, la sensación de orgullo va a ser mucho más especial que la
última vez que lo hice.
Nota de la autora:
No, el collar de la imagen no corresponde a ninguno que haya puesto en la realidad, pero creo que cualquiera (sobre todo uno) que tenga uno de este tipo, también podría aprovechar para deshacerse de el.
Y la misión fue completada con éxito. Ya no ocupan ningún espacio.
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