Empecé a desabrocharte cada uno de los botones de tu camisa,
tomándome más tiempo del necesario en cada uno. Lo bueno se hace esperar.
Tu mirada no podía evitar ir de un lado a otro, buscando a
cualquier senderista que pudiera acercarse y acabar con lo que allí iba a
pasar.
Te quite la camisa y la dejé encima de la mesa, fui a por mí bolsa de juguetes y la abrí
mientras me divertía mirando tu cara.
Saque tu collar, aquel de cuero negro que usábamos en las
grandes ocasiones. Y me dirigí hacia ti
de nuevo para colocarlo alrededor de tu
cuello.
Ese siempre ha sido uno de los mejores momentos, solo
nuestro.
Nuestras sonrisas se cruzaron por un momento…. Hasta que te
diste cuenta de que mis manos iban directas a tu cinturón.
- - Si, te voy a desnudar.
En ese momento te pusiste serio y yo solté una carcajada.
Siempre tan digno.
Una vez que lo había desabrochado, fue el turno del botón y
de la cremallera del pantalón. Pude sentir como tragabas saliva mientras los
dejaba caer al suelo y te pedía que terminaras de sacártelos.
Obedeciste sin pensarlo.
- -
Todo… quítatelo todo – Dije
No puedo evitar divertirme cuando veo como tus nervios te
ganan la partida y tengo que repetirte las cosas. Sabes que no me gusta tener
que hacerlo y que en algún momento pienso cobrármelo.
Bajas tu mirada al suelo, mientras te deshaces de tu ropa
interior y susurras un:
- -
Ya está, Mi Dueña.
Me retiro de nuevo a la bolsa, sin perderte de vista… y saco
unas muñequeras y un mosquetón. Me acerco de nuevo y las pongo en tus muñecas.
Agarro la argolla de tu collar… y te llevo hasta un árbol que
hay justo en frente de la mesa.
Te quedas apoyado en el mientras yo regreso a la bolsa y
rebusco en ella. Unas pinzas, el flogger ¿la mordaza?. Si a mí no me gusta usar
mordazas…
Cojo el flogger y mientras me dirijo hacia ti, veo como
vuelves a sonreír. Veo en tu mirada tus ganas… y te dejo ver las mías.
Cuando estoy muy cerca me susurras con cara de bueno:
-
- Por favor, azóteme.
Y te sonrío…
-
- Claro cielo, como gustes.
-
- ¿?¿?¿?
Un azote rápido con el flogger… pero… Te pido que abraces el árbol y engancho el mosquetón
uniendo las dos muñequeras.
Tu trasero queda expuesto y dispuesto para que le haga lo
que quiera… Acaricio tu trasero con el flogger .
-
- Tengo hambre, ¿tú no?
Y me dirijo a la mesa….
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