9 dic 2018

Desayunos sin Café.


Domingo, 7:15 de la mañana.

Me desvelo.

Vienen a mi cabeza una y otra vez imágenes de nuestra última vez.
Todas las veces que estamos juntos son especiales, pero las hay que por alguna razón permanecen más en la memoria que otras.

Tus gemidos, los olores…
… El “sólo un poco más”…

Las risas, las caricias, las miradas…
… Vamos a empezar de nuevo…

La tensión de tu piel, su color…
… Su calor… 

Ese juego infinito que solo nosotros somos capaces de crear…
… Mis dedos, tu piel ardiendo…

Tu respiración acelerada cuando te acaricio…

Miro el teléfono:
Tú también estas desvelado.

... ¿También pensarás en nuestra última vez?

0 comentarios:

Publicar un comentario